Gracias a la experiencia obtenida durante años de trabajo con impresoras de transferencia térmica, hemos llegado a la conclusión de que la vida de las impresoras aumenta notablemente si dedicamos un cuidado y una atención periódica a nuestras máquinas.
Para ello, se aconseja realizar un pequeño y fácil mantenimiento en función del uso que le demos.
El equipo técnico de
RQ LABELS le asesorará e indicará con qué frecuencia debe realizarse. No dude en consultarnos!
Este proceso se resume en 4 simples pasos:
- Para el primero de los pasos simplemente debemos usar un trapo o paño que no deje residuo, impregnado con cualquier líquido de limpieza general y limpiar exteriormente la impresora, teniendo en cuenta no dañar la botonera. Para ello podemos taparla con un plástico o similar mientras realizamos ésta acción.
- A continuación procedemos a realizar la misma limpieza en el interior de la impresora habiendo extraído previamente el rollo de etiquetas y el de ribbon.
- Una vez realizado, seguimos con la limpieza del cabezal impresor. Empezaremos pasando de izquierda a derecha del cabezal una herramienta no cortante que nos permita desprender cualquier tipo de ribbon o suciedad que haya podido quedarse pegada. Es recomendable usar una herramienta suficientemente rígida como para poder eliminar éstos restos. Luego pasaremos un paño impregnado con alcohol a lo largo del cabezal. Aconsejamos utilizar alcohol de uso farmacéutico y una servilleta o pañuelo de papel, doblándolo hasta que nos quede un tamaño manipulable y cómodo.
- Por último, podemos usar el mismo papel para limpiar el rodillo de arrastre ayudándonos con el dedo para ir girándolo y poder limpiar toda su superfície. Este elemento es muy sensible a herramientas cortantes, por lo que, en caso de restos en el rodillo, se tiene que evitar usar tijeras o cútters para retirarlos.